Salmo 12:6-7 "Las palabras de Jehovà son palabras limpias, como plata refinada e horno de tierra, purificada siete veces. Tù, Jehovà, los guardaràs..."
En estos dìas recibì un correo de una amiga de la ciudad de Barranquilla donde me escribiò este pasaje de los Salmos, el cual he estado meditando y ha sido una palabra que me han llenado y bendecido mucho.
En el contexto donde cada uno de nosotros nos movemos muchas veces nos vamos a tropezar con personas, situaciones y muchas cosas adversas que van a querer dañarnos, tentarnos, etc. Pero frente a todas esas cosas Dios se levanta a favor nuestro guardàndonos de las asechanzas del enemigo.
Ciertamente las palabras del Señor son palabras limpias, fieles, Èl nunca nos va a fallar, siempre està atento a sus hijos guardàndolos y protegièndolos de todo mal. El enemigo siempre nos va amenazar pero somos nosotros quienes decidimos si su amenaza se realiza, no importa el contexto donde nos encontremos està en nosotros si permitimos dejarnos influenciar por el medio.
Cuando Daniel fue raptado por el rey de Babilonia, Nabucodonosor, a pesar del lugar donde se encontraba y las condiciones que le fueron impuestas èl propuso no contaminarse con la comida del rey ni beber de su vino, ademàs de eso dijo al jefe de los eunucos que no se le obigase a contaminarse.
Debemos proponernos y tomar decisiones radicales en nuestra vida que busquen agradar a nuestro Dios, no nos pongamos a inventar excusas que fue el lugar, que la tentaciòn, que me presionaron, que si lo uno o lo otro. Dios siempre nos va a dar la salida para todo esto.
La fidelidad de Daniel para con Dios fue de mucha honra para el Señor y dice la escritura que Dios puso a Daniel en gracia y en buena voluntad con el jefe de los eunucos. Dios honra nuestra fidelidad hacia èl.
Amigo(a), mantente firme y fiel a Dios, fortalècete en èl y el Señor te guardarà de toda mentira del enemigo. Dios te continue bendiciendo!!.